CHAMPAGNE JACQUES SELOSSE SUBSTANCE

Desgranado en julio de 2019, el último lanzamiento del NV Grand Cru Blanc de Blancs Substance es emocionante. Saliendo de la copa con un bouquet profundo y caleidoscópico de cáscaras confitadas, aceite de cítricos, nueces tostadas, vin jaune, fenogreco, limones confitados, fruta de huerta dorada y frangipane, tiene mucho cuerpo, es rico y envolvente, con un ataque de textura extravagante que da paso a un núcleo amplio que llena la boca y que cae en cascada sobre el paladar con una capa tras otra de fruta madura y matices sápidos, animados por una espuma ultra refinada. Expansivo y penetrante, no sólo su estilo singular sino también su concentración y plenitud lo sitúan en una categoría propia. Es la botella de Substance más conmovedora que he probado nunca, y no he podido dejar de pensar en ella, ni de beberla. Como escribí el año pasado, esta es la cuvée que mejor ejemplifica el argumento de Selosse (parafraseando) de que un élevage oxidativo puede purgar un vino de lo orgánico, dejando sólo lo mineral -en este caso, argumenta, la huella de dos lieux-dits de Avize, Les Chantereines y Les Marvillannes. Para los admiradores de los vinos de Selosse, esto lo convierte en uno de los embotellados más convincentes de la cartera, al igual que sus detractores probablemente lo clasifiquen como el más divisivo. Ninguna cuvée podría ser más emblemática de un hombre que es, no solo sino más que ningún otro, responsable de la transformación de la Champaña en los últimos 30 o 40 años.

Fuente: The Wine Advocate, Robert Parker